Comportamiento social y sexual de los canguros

Los grupos de canguros son llamados turbas. El tamaño y la estabilidad de las turbas varía entre regiones geográficas, el este de Australia tiene agregaciones más grandes y estables que las zonas áridas, más al oeste. Las agregaciones más grandes poseen mayores interacciones y estructuras sociales complejas, comparable a la de los ungulados. Un comportamiento común tocarse y olerse con la nariz, lo que en su mayoría se produce cuando un nuevo individuo se une a un grupo. Los canguros obtienen mucha información a partir de estas señales olfativas, este comportamiento refuerza la cohesión social sin agresión consecuente. Durante el olfateo mutuo, si un canguro es más pequeño colocará su cuerpo y su cabeza más cerca del suelo, posiblemente una forma de sumisión. Saludos entre mechos y hebras son comunes,  los machos más grandes son los más involucrados en las reuniones con hembras. La mayoría  de los otros comportamientos no antagónicos se producen entre las madres y sus crías.

La actividad sexual de los canguros se compone de pares consorte, las hembras en celo vagan ampliamente y atraen la atención de los machos con señales visibles, el macho controlará y seguirá todos sus movimientos, él huele su orina para ver si ella está en celo, un proceso conocido como respuesta flehmen, el macho entonces se procederá a acercarse lentamente para evitar alarmarla, si la hembra no huye, el macho seguirá lamiendo, pateando, arañando y seguirá la cópula. Después de que la cópula ha terminado, el macho irá en busca de otra hembra. El emparejamiento puede tomar varios días y la cópula es también un proceso largo. Así, un par consortes es probable que atraiga la atención de un macho rival, cando machos grandes están cerca de las hembras en celo, los machos más pequeños irán en busca de otras hembras disponibles.

Los combates han sido descritos en todas las especies de canguro. Las peleas entre los canguros pueden ser breves o largas y ritualizadas. En situaciones altamente competitivas los machos lucharán por las hembras en celo o en lugares limitados para beber, las peleas son breves. Ambos sexos lucharán por los puntos de beber, pero la lucha larga ritualizada o “boxeo” se realiza en gran medida por los machos.

Los machos pequeños luchan más a menudo cerca de las hembras en celo, mientras que los machos grandes consortes no parecen involucrarse. Las peleas ritualizadas pueden surgir, de repente, cuando los machos están pastando juntos, sin embargo, la mayoría de las peleas están precedidas por dos machos rascado y preparándose entre sí. Uno o ambos de ellos adoptan una postura alta, de pie, con un desafío por agarrar el cuello del otro macho con su pata delantera. A veces, el desafío será rechazado.

Los machos grandes a menudo rechazan los retos de machos más pequeños. Durante el combate, los combatientes adoptan una postura alta, de pie, y patean en la cabeza, los hombros y el pecho. También se bloquearán con los antebrazos y lucharán y competirán entre ellos, utilizan el equilibrio en la cola para patearse el uno al otro en el abdomen. Las peleas breves son similares excepto que no existe bloqueo de antebrazo. Un combatiente perdedor parece patear con más frecuencia, tal vez para parar los golpes del eventual ganador. Los ganadores se deciden cuando un canguro se desprende de la pelea y se retira. Los ganadores de las peleas son capaces de empujar a sus oponentes hacia atrás o hacia la tierra. Estas luchas pueden servir para establecer jerarquías de dominancia entre los machos y los ganadores de las peleas se han visto desplazar a su rival desde los sitios de descanso al final del día. Los machos dominantes pueden tirar hierba para intimidar a sus subordinados.